Espeleólogos ramaliegos conectan las principales cavidades del Mortillano

Miembros de la AER unieron las dos principales cuevas del macizo en Soba, que con más de 100
kilómetros de longitud, son el segundo sistema más largo de la Península

Miembros de la Agrupación Espeleológica Ramaliega (AER) conectaron el pasado jueves las dos principales cavidades del macizo del Mortillano (Soba), logrando de esta manera un sistema de más de 100 kilómetros de desarrollo, lo que le sitúa en el primer puesto de las cavidades cántabras, y el segundo a nivel nacional. En el ránking internacional, ocupa desde ahora el
puesto decimoctavo.

Hasta el jueves, las redes de Garma Ciega y del Mortero de Astrana contaban cada una de ellas con algo más de 50 kilómetros. A pesar de que desde hace años se suponía que conformaban
un único sistema, la unión física entre ambas no había sido posible, a pesar de los múltiples intentos al respecto realizados por espeleólogos nacionales y franceses. La profundidad
a la que se encontraban las galerías que más se acercaban entre sí, y las duras condiciones de
exploración habían hecho fracasar todos los intentos previos. En el conjunto de España, el sistema del Mortillano es sólo superado por el complejo burgalés de Ojo Guareña, con 110 kilómetros. Pero sin desmerecer al gigante burgalés, los datos parecen confi rmar que la red sobana puede ser considerada como la cavidad española más importante.

Así, a pesar de su menor longitud, la profundidad del nuevo sistema es de 848 metros, frente a los 165 de Ojo Guareña, y aunque el tamaño de sus galerías es muy variable, se caracteriza por la gran magnitud de buena parte de las mismas. Cuenta en su interior con el Pozo Negro, el segundo mayor pozo de España (340 metros de vertical absoluta), que fue explorado hace un
par de años por el grupo madrileño SEII. Hidrológicamente, son siete los ríos que han conformado el sistema, creando un complejo dédalo de galerías a diferentes niveles.
En opinión de los espeleólogos del AER, el segundo puesto es sólo temporal. «Tenemos zonas exploradas sin topografiar que aún no hemos computado, y además existen varias incógnitas en diversos puntos del sistema, por lo que durante los próximos meses iremos sumando metros», afi rma Ángel García. Los exploradores consideran que este es un aspecto «anecdótico», y que lo
fundamental es que con esta unión se ha puesto de relieve una vez más la importancia de la zona del Alto Asón en la espeleología.